Cada vez que hay un avistamiento de tiburonescerca de una playa o se produce un accidente, se desata una especie de pánico silencioso. Aunque sabemos de memoria lo que dicen los expertos: "Es extremadamente raro que un tiburón ataque a un humano". A veces pasa. Los españoles tenemos tendencia a creer en las cosas poco probables, no hay más que ver las colas para comprar lotería cada año por Navidad.

El tiburón es un animal que provoca un miedo quizás injustificado. La película Tiburón, de Steven Spielberg, estrenada en 1975, ha dejado una huella profunda. Pero la realidad es que, por ejemplo, el número de fallecidos por ahogamiento es infinitamente superior, y ello no desata un miedo atroz a meterse en el agua.

Las pocas mordeduras que ocurren cada año son un excelente indicador de que los tiburones no se alimentan de humanos y que la mayoría de los episodios se deben a un accidente, o en el peor de los casos, a un acto de defensa.

Si hacemos una media, entre 2013 y 2022 ha habido 74 mordeduras en todo el mundo. Así lo indican los datos del Archivo Internacional de Ataques de Tiburón del Museo de Historia Natural de Florida, institución que se encarga de monitorizar este fenómeno en todo el mundo.

¿Cuántos ataques de tiburón hay en España?

La respuesta quizás te sorprenda: desde 1847 solo ha habido 6 ataques de tiburón en España, y ninguno de ellos fue mortal. El riesgo de ser mordido por un tiburón sigue siendo "extremadamente bajo". Las tasas de mortalidad llevan décadas disminuyendo, lo que refleja los avances en la seguridad en las playas, el tratamiento médico y la concienciación pública.

En cuanto a los ataques, se cree que unas de las causas por las que puede haber mordeduras a los humanos sin provocación previa es la modificación de sus entornos naturales, de tal forma que los tiburones se sientan atraídos a las zonas donde están los bañistas, en busca de su fuente natural de alimento. Ello podría incitarles a morder a los humanos cuando de otro modo no lo harían.

Cuántos tipos de tiburones existen

Los tiburones son una familia diversa que varía en tamaño desde el tiburón pigmeo, que puede medir solo 17 cm, hasta el tiburón ballena, que puede alcanzar 12 metros.

Algunas de las especies de tiburones más conocidas son el tiburón blanco, el tiburón tigre, el tiburón toro, el tiburón martillo, el tiburón ballena y el tiburón azul. Además de las especies reconocidas, es probable que aún haya otras muchas desconocidas para la ciencia, ya que los científicos continúan descubriendo nuevas especies en los océanos del mundo.

Qué tipo de tiburones hay en España

Existen muchos tipos de tiburones que habitan en distintos puntos del océano, pero los que se han visitado las playas españolas recientemente son los siguientes:

  • Tintoretas o tiburón azul (o quellas, como le llaman en Canarias): esta especie puede superar los 4 metros de longitud, aunque por lo general mide alrededor de 2 metros. Además, se diferencian de otros tiburones por tener un hocico muy puntiagudo. El hábitat de esta especie está en los océanos Atlántico y Pacífico, pero también en el mar Mediterráneo, donde suele nadar por aguas profundas. Su acercamiento a la costa sorprende a los expertos, que asocian estos episodios al proceso de subtropicalización que estaría viviendo España, según la publicación citada. Las tintoreras son depredadores carnívoros, pero los humanos no estamos en su dieta. Su alimento principal son pequeños peces, moluscos, cefalópodos y algunos pájaros.
  • Cañabota gris: es una especie muy frecuente en todo Mediterráneo e inofensiva, pese a su gran tamaño. Estos tiburones suelen permanecer en aguas cálidas. Tiene seis aberturas branquiales a ambos lados de la cabeza, lo que morfológicamente lo distingue de otros escualos. En cuanto al color, puede ir desde el gris claro o tener tonos más oscuros. Se alimenta de crustáceos y pececillos.
  • Tiburones pintarrojas: son pequeños y prácticamente no representan riesgo alguno para los bañistas. Es nocturno y de comportamiento pacífico, además de que vive en las profundidades.
  • Tiburón cazón: también llamado caella, bienmesabe, tiburón vitamínico o trompa de cristal. Tiene un cuerpo cartilaginoso, mide unos dos metros como máximo y puede llegar a pesar hasta 45 kg. Prefiere las aguas más frías y profundas en verano, y opta por las más cálidas y cercanas a la costa en invierno.

Qué hacer si te encuentras un tiburón tintorera

Seamos sinceros, si estamos cara a cara con un tiburón, lo más probable es que no actuemos de forma racional. Pero mantener la calma es fundamental. Los expertos, en vista de que estos avistamientos podrían repetirse más veces a lo largo del verano, dan estas recomendaciones a los bañistas:

1.Si estás en la costa y ves una tintorera, sal del agua por precaución. A veces estos animales, que tienen muy mala vista, realizan "mordiscos exploratorios" para determinar si somos o no la presa que están buscando.

2.Si, en cambio, tenemos muy cerca a la tintorera, debemos evitar realizar movimientos bruscos o salir corriendo, aunque el cuerpo nos lo pida. Una estrategia para que el tiburón identifique que no somos una presa es realizar sonidos bajo el agua o emitir burbujas.

3.Hay otra técnica que se supone que funciona, pero esa es para quienes tienen nervios de acero. Consiste en poner la mano firme y darles un pequeño golpe en el morro en caso de que se dirijan hacia uno, desplazando su dirección.

Consejos generales frente a los tiburones

Hay una clave que tener muy presente cuando se trata de tiburones: son depredadores, tienen el potencial de provocar graves lesiones. Si te encuentras con uno en el agua, debes tratar de parecer lo que sea menos una presa. Es importante tener interacciones respetuosas y parecer un depredador como ellos, explican desde National Geographic.

Si huyes, el tiburón verá el comportamiento típico de todas sus presas, pero si actúas como un depredador, quedándote agrupado o incluso nadando hacia ellos, no atacará.

Estos son algunos consejos para nadar con tiburones:

  • Mantenerse siempre en grupo.
  • No alejarse demasiado de la costa.
  • Evitar las primeras horas del día o el crepúsculo, cuando tiburones se alimentan.
  • No llevar nada brillante, pues la luz reflejada puede confundir al tiburón con las escamas de un pez.
  • Evitar el baño cuando el agua está turbia y no llevar ropa con colores brillantes.
  • No chapotear.
  • Por supuesto, no molestar a los tiburones.

Clasificación de tiburones

La manera más común y científica de clasificar los tiburones es mediante la taxonomía. Los tiburones se dividen en ocho órdenes, cada una de las cuales representa un grupo de tiburones con características similares. Estos órdenes son:

  • Tiburones squaliformes: son tiburones de aguas profundas. Incluye alrededor de 130 especies, como el tiburón peregrino, el tiburón de Groenlandia y el tiburón zorro. Los tiburones de esta orden suelen tener dos aletas dorsales, sin aletas anales y cinco pares de hendiduras branquiales.
  • Tiburones squatiniformes: este orden se conoce comúnmente como "tiburones ángel" debido a su aspecto plano y alargado que recuerda a las rayas. Tienen aletas pectorales anchas y la boca en la parte inferior del cuerpo, adaptaciones ideales para su estilo de vida de emboscada en el fondo del mar.
  • Tiburones carcharhiniformes: este es el mayor orden de tiburones y contiene casi la mitad de todas las especies de tiburones, incluyendo el tiburón toro, el tiburón tigre y el tiburón gris de arrecife. Se caracterizan por tener una membrana nictitante en los ojos, dos aletas dorsales, una aleta anal y cinco hendiduras branquiales.
  • Tiburones heterodontiformes: se conoce comúnmente como "tiburones cornudos" debido a los pequeños espolones que tienen por encima de los ojos. Son pequeños tiburones que rara vez superan el metro de longitud y se encuentran principalmente en aguas tropicales y subtropicales del Pacífico y el Índico.
  • Tiburones hexanchiformes: es un orden de tiburones primitivos que se distingue por tener seis o siete hendiduras branquiales, en lugar de las cinco típicas en la mayoría de los tiburones. Incluye especies como el tiburón de gorguera y el tiburón de siete branquias.

En resumen, la posibilidad de un encuentro peligroso con un tiburón es mínima, y existen recomendaciones claras para garantizar la seguridad tanto de las personas como de estos extraordinarios animales. Mantenerse informado y respetar su espacio natural son los primeros pasos para asegurar un equilibrio saludable.